Los sensores que se han instalado, y otros que se podrán instalar, están configurados para detectar niveles de toxicidad graves de acuerdo a la normativa de emergencias químicas. De acuerdo con el Plaseqta y otra normativa, las industrias tienen que notificar a las autoridades si sufren un accidente que puede causar afectación al exterior.En un futuro, y una vez la prueba piloto haya sido validada y ampliada, estos sistemas de alertas automáticas tiene que permitir avisar a la población de forma más ágil en el caso que hubiera una fuga grave que hiciera necesaroi el confinamiento, mediante el uso de las sirenas de riesgo químico existentes o también cuando el Estado tenga lista la tecnologia del sistema “cell broadcasting” de avisos masivos a los móviles por SMS. Una Directiva Europea obliga a los Estados miembros a implementar este sistema de mensajería antes de este verano.